
Este protocolo surge dentro del Plan de Acción para mejorar la Atención Sanitaria a las Personas con Trastorno del Espectro Autista (TEA) en Andalucía desarrollado por la Federación Autismo Andalucía y la Consejería de Salud y Familias cuyo objetivo es que las personas con autismo tengan la misma atención sanitaria que el resto de los andaluces.
Las guías incluidas en este plan vienen a establecer pautas de cómo debe atenderse a las personas con TEA en el ámbito sanitario, desde la detección, pautas de actuación en salud primaria, hospitalizaciones, urgencias y accesibilidad. También hacen recomendaciones como mejorar la coordinación entre el profesional sanitario y la persona con TEA y su entorno o que los lugares para la espera deben ser tranquilos y tener pocos estímulos sensoriales.