
Nacer, es un impacto con la realidad que nos muestra que el mundo es un camino distinto, donde no siempre habrá una persona que te cargue y que te de todo lo que tú necesites, es más bien un lugar en donde conforme más crezcas, crecerán también las responsabilidades en tu vida y difícilmente vas a tener el apoyo de cuando eras bebe. Entonces pienso como irás perdiendo el apoyo externo (madre) desde la infancia y juventud, para trasladarlo y trasladarte al auto apoyo en la vida adulta. Este camino me ha costado recorrerlo, trabajarlo y aceptarlo pero que me ha llevado a conocerme profundamente, a tener un encuentro conmigo, me permitió aceptar la realidad de lo que soy y con ello apoyarme a mí mismo, para lograr lo que yo quiero ser y no lo que me impongan.
La apuesta de trabajar en grupos es precisamente encontrar miradas apreciativas, libres de juicios para permitir el desarrollo natural del grupo, esto mediante la identificación de sus recursos personales. Esta mirada no solo permite que el joven sea constructor de su propio destino, sino también de que comprenda que en la crisis hay momentos en donde él/ella es a quien le corresponde afrentarse a la vida con sus propias herramientas (Castañeda, 2008).
Hay cosas muy interesantes que comparten los y las jóvenes en el grupo, experiencias, aprendizajes, etc. Creo firmemente que una intervención simple puede ocasionar un impacto y tiene una influencia en el desarrollo de la persona. Mi trabajo es reflejar y mostrar que ellos/as son la herramienta y no imponer experiencias que me funcionaron a mí, más bien fortalecer el auto apoyo de procesos y situaciones. Este trabajo es lo que más me apasiona hacer y día con día voy perfeccionando.
José Luis Castro Rodríguez es Licenciado en Psicología y Máster en Psicoterapia Humanista y Educación para la Paz. Actualmente estudiando un doctorado sobre psicoterapia humanista, trabaja con jóvenes grupos de crecimiento-encuentro.