El juego online es un problema que afecta especialmente a la población juvenil y es necesario establecer mecanismos preventivos que eviten la adicción. Tomando en cuenta esa evidencia, la segunda fase de la campaña de prevención de adicciones #SinFiltros desarrollada por la Fundación de Educación para la Salud (FUNDADEPS) se enfoca específicamente en la prevención de las adicciones tecnológicas, el juego on-line y la promoción de hábitos saludables, como la construcción de relaciones de buen trato y el cuidado entre iguales desde un enfoque de género.
La campaña #SinFiltros es una iniciativa de FUNDADEPS en el marco de su Programa Fedra, desarrollada con el apoyo del Plan Nacional sobre Drogas del Ministerio de Sanidad. La iniciativa está dirigida a jóvenes entre 14 y 25 años, y para conectar con ellos y ellas #SinFiltros centra buena parte de sus acciones en las redes sociales (Instagram, Facebook y Twitter).
De forma global, las diferentes acciones de la campaña que se desarrollaron a lo largo del 2020 han atendido a diferentes tipos de adicciones muy presentes en la población joven, como son el alcohol, el tabaco, el cannabis, los hipnosedantes y, como novedad respecto a otras campañas, las bebidas energéticas y las adicciones tecnológicas y de juego.
Evidencias y estrategias de prevención
La campaña toma como principal fuente de información la investigación “Dificultades en el tratamiento del juego online: recomendaciones de profesionales y personas atendidas”, liderada por la Red de Atención a las Adicciones (UNAD). De ella se desprenden una serie de evidencias de sumo interés para el conjunto de profesionales que trabajan en la prevención de adicciones en la población juvenil:
- Privarse de sueño para conectarse a la red con tiempos de conexión anormalmente altos y descuidar otras actividades importantes, como el contacto con la familia, las relaciones sociales, el estudio o el cuidado de la salud, son las principales señales de alarma. Denotan una dependencia a las TIC o a las redes sociales y pueden ser un reflejo de la conversión de una afición en una adicción.
- Los juegos que combinan azar y habilidad pueden conllevar una gran carga de preparación y estudio para intentar desarrollar estrategias efectivas para conseguir ganar dinero. El componente de habilidad genera un sesgo retrospectivo en algunos jugadores y jugadoras. Además, este tipo de juegos generan algunas distorsiones cognitivas propias; por ejemplo, la ilusión de control es común a muchos juegos de azar, pero en el caso de los juegos de habilidad se acentúa.
- El teléfono móvil es, con muchísima diferencia, el dispositivo preferido para jugar online. Tiene múltiples ventajas, entre las que destacan la comodidad de poder jugar en cualquier lugar y la facilidad para esconder lo que estás haciendo si no están viendo tu pantalla.
- Cuando el trastorno de juego avanza, las y los jóvenes reducen su actividad en redes sociales, ni siquiera los triunfos.
A partir de estas evidencias que permiten caracterizar la adicción a los juegos online, la campaña #SinFiltro promueve una serie de estrategias de prevención:
- El uso de las TIC y de las redes sociales impone tanto a personas jóvenes como adultas una responsabilidad de doble dirección: las personas jóvenes pueden adiestrar a los padres y las madres en el uso de las nuevas tecnologías, de su lenguaje y sus posibilidades; los adultos, a su vez, deben enseñar a sus hijos e hijas a usarlas en su justa medida.
- Las familias y el sistema educativo deben ayudar a los y las jóvenes a desarrollar la habilidad de la comunicación cara a cara, estimular la comunicación y el diálogo en la propia familia.
- Fomentar la relación con otras personas, potenciar aficiones tales como la lectura, el cine y otras actividades culturales, estimular el deporte y las actividades en equipo.