
Que las personas mayores sigan ejerciendo un papel activo en la sociedad y puedan vivir una vida lo más saludable y satisfactoria posible son dos de los objetivos planteados por la Comisión Europea para el próximo curso, en el que se celebrará el Año Europeo del Envejecimiento Activo y de la Solidaridad Intergeneracional. Esta iniciativa será una ocasión para todos de reflexionar sobre el hecho de que los europeos y las europeas viven ahora más y con más salud que nunca, y asumir los desafíos que esto demanda tanto en términos de permanencia el mercado laboral, en compartir sus experiencias con otras generaciones y en disponer de los recursos sociales necesarios para poder darle la mayor calidad de vida a los años.
Como señala la Comisión Europea, el reto político en esta materia es el de mejorar las oportunidades de envejecer activamente y con autonomía, actuando en ámbitos tan distintos como el empleo, la sanidad, los servicios sociales, la formación de adultos, el voluntariado, la vivienda, los servicios informáticos o el transporte.
Las organizaciones e iniciativas que quieran apoyo financiero pueden solicitarlo de los instrumentos existentes de la UE, como el Fondo Social Europeo, el programa de educación permanente y el Programa Marco de Investigación.